Después de catalogarlo como inmueble con daños por el sismo de magnitud 7.1, el gobierno de Antonio Gali Fayad y el interino de Guillermo Pacheco Pulido abandonaron el Centro de Salud en Huehuetlán El Chico.

En un informe de finales de 2018, antes de que asumiera la gubernatura Martha Erika Alonso, la autoridad reportó avances de 99 por ciento.

Sin embargo, las instalaciones médicas en este municipio mixteco, localizado a 20 minutos de Chiautla de Tapia, no reabrieron, y ahora se encuentra en deterioro.

El Popular, diario imparcial de Puebla hizo una visita al Centro de Salud en el que crecieron las enredaderas y ya cubren el acceso peatonal y vehicular, mientras en la pequeña explanada y el pasillo exterior también hay maleza.

En un extremo del edificio se encontró un hundimiento, resultado del sismo del 19 de septiembre, que provocó el rompimiento de una acera.

No hay forma de ingresar al sitio, pero desde fuera se pudo constatar la existencia de un agrietamiento, justo a la misma altura de la fractura de referencia.

Todas las aéreas se encuentran vacías; no hay personal ni pacientes, y tampoco mobiliario para el funcionamiento del inmueble.

Habitantes de Huehuetlán El Chico comentaron que después del sismo se percataron de la presencia de funcionarios para la revisión de las instalaciones, pero el inmueble nunca volvió a recibir a los derechohabientes.

Yolanda Contreras vive en el centro de la comunidad y comentó que pese a lo lejos que le queda el Centro de Salud, nunca faltaba para la atención de su hijo; sin embargo, los dos últimos años se quedó sin ese apoyo.

“Después de que tembló no volvieron a abrir, y toda la gente que tenías consultas aquí, ya sea para nosotros o familiares, pues nos quedamos prácticamente sin nada, y tenemos que ir a Chiautla o a Izúcar (de Matamoros), y cuesta dinero,” dijo.

“Si ya habían construido este Centro de Salud, ¿por qué lo abandonaron? Ahora no sabemos cuándo van a reabrir. Aunque como ya pasó mucho tiempo, en una de ésas ya ni siquiera lo abren de nuevo,” añadió.

Martín Morales, también de Huehuetlán El Chico, criticó que en 24 meses ninguna autoridad, ni la municipal, se interesara por restablecer el servicio en el centro de salud.

Comentó que a simple vista no se observaron daños graves, por lo que expresó que no hay motivos de peso para que lo mantengan cerrado, en perjuicio de los pobladores que requieren de la atención médica.

“Si usted entra y revisa, porque hasta eso no cerraron bien y cualquiera se puede pasar, como digo, la verdad es que no tiene más que un hoyo que se hizo a un lado y una cuarteadura que apenas y se nota,” dijo.

“Si sólo es eso, pues ya que arreglen eso y listo, que lo abran; porque mucha gente necesita las instalaciones,” agregó.

Huehuetlán, al 2015, contaba con una población en condiciones de pobreza de 2 mil 800 personas; es decir, 24.33 por ciento del total de habitantes.

El informe den Gali al final de su gestión dio cuenta de que se demolieron dos instalaciones de salud, una en Tepemaxalco y la otra en San Pedro Ocotlán, de las regiones de Izúcar de Matamoros y Acatlán de Osorio, respectivamente.

No obstante, no difundió los detalles de acciones y avances en cada uno de los inmuebles reportados en materia de salud, y el gobierno interino tampoco otorgó seguimiento para verificar esas acciones.

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