Nuestras danzas son un reflejo de México: Cristóbal Ramírez

El Ballet Folclórico del CCU celebra 35 años de existencia con una presentación que transportará a los asistentes a distintos lugares de nuestro país

El Ballet Folclórico del Complejo Cultural Universitario (CCU) es una agrupación que durante años se ha encargado de representar las danzas y los bailes tradicionales de nuestro país.

En el estado y en México abundan los grupos que se dedican al folclor mexicano, pero pocos lo hacen con el profesionalismo y dedicación que caracteriza al ballet de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP). Estas dos cualidades les han permitido perdurar; por ello, este año festejan 35 años de existencia, que celebrarán hoy con una gala de primer nivel.

En entrevista con El Popular, diario imparcial de Puebla, Cristóbal Ramírez Macip, director y coreógrafo del Ballet Folclórico CCU y secretario general para América Central de la Organización Internacional del Arte Popular, compartió parte de la historia de este conjunto dancístico y la labor que realiza para preservar los bailes típicos de México.

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¿Cómo surgió el Ballet Folclórico CCU?

El proyecto nace a partir de la inquietud de un grupo de universitarios que querían crear un ballet folclórico. El antecedente fueron los talleres que se daban en distintos espacios de la universidad en ese entonces. A partir del éxito de esas actividades, nos invitaron a hacer un proyecto más grande.

A pesar de que teníamos otros compromisos en ese momento, dispusimos de nuestro tiempo para desarrollar la encomienda; en un tiempo muy corto empezamos a tener éxito gracias al apoyo del maestro Rodolfo Reyes Cortés, director del Ballet Nacional de Cuba; y de Rafael Zamarripa Castañeda, director del Ballet Folclórico de la Universidad de Colima, además de otros compañeros que ya no se encuentran con nosotros.

¿Cuáles son los espectáculos que han montado y qué dificultad han representado?

Hemos realizado 14 espectáculos, con los que hemos participado en 70 festivales nacionales e internacionales y que se han presentado en comunidades pequeñas, así como en grandes ciudades. Algunos ejemplo son: Ritual a Quetzalcóatl, que se basa en literatura mesoamericana y que se ha representado por casi 30 años en la Pirámide de Cholula; Puebla y la intervención francesa, que no sólo hace referencia a la Batalla del 5 de Mayo, sino a los antecedentes y las consecuencias de este hecho; Bajo el cielo de los dioses, espectáculo que utiliza de base el Popol Vuh y recursos multimedia, que generan experiencias únicas en el asistente.

Una dificultad que nos hemos topado es encontrar a aquellos bailarines que tengan la pasión por la danza; de 300 que ingresan sólo se quedan 30 en promedio. Nuestros bailes son un reflejo de cómo era y lo que son México y Puebla en la actualidad. Es un trabajo duro, pero requiere constancia y permanencia.

Las presentaciones siempre generan grandes expectativas, al ser espectáculos que representan la cosmovisión de algunos pueblos originarios. ¿Cuál es el proceso para montar los espectáculos?

Tenemos un asesoramiento antropológico por parte de expertos en el tema. Por ejemplo, Eduardo Merlo, quien siempre nos apoya para realizar las piezas con el mayor apego posible a la tradición. En el ámbito musical, el maestro Juan Arturo Ortega es un genio al momento de componer. Entre sus obras se encuentra el Himno a Puebla y el del estado de Chihuahua

Él es un conocedor de lo que es Puebla, y por ello su ayuda siempre es necesaria. También nos apoyamos en otras disciplinas como marketing, comunicación y diseño, que se encargan de difundir el trabajo de la compañía.

La riqueza cultural de los pueblos originarios está desapareciendo. Por ejemplo, los hablantes de lenguas indígenas cada vez disminuyen más, ¿ocurre lo mismo con los que practican la danza folclórica?

Los grupos folclóricos de la ciudad y de las poblaciones han incrementado, lo cual es bueno, porque se practica y se hace visible. Lo malo es que no todos tienen la formación suficiente para poder recrear de forma adecuada los bailes.

Si nos vamos a los lugares de origen de las danzas; sí se están perdiendo por la globalización y la migración; hay pueblos en los que los habitantes son sólo niños, mujeres y ancianos, debido a que los jóvenes se marchan a Estados Unidos. El cambio generacional también ha afectado, ya que muchos jóvenes nacidos en este milenio lo último que quieren es parecer indígenas; ellos quieren andar a la moda y evitan hablar en su lengua nativa. Esto está pasando en gran parte de nuestro país.

¿Cuál es el papel de los ciudadanos, del gobierno y de los pueblos originarios para evitar que sigan desapareciendo las danzas y los bailes?

Como ciudadanos, nos corresponde el respeto y la valoración de los indígenas respecto a sus prácticas y costumbres. El respeto al otro es algo que, por desgracia, no se practica mucho en nuestra sociedad. En el ámbito escolar, una propuesta podría ser que los maestros, en los bailes escolares, presenten las danzas nativas de su región; ésa sería una forma de incentivar la continuidad del legado cultural. En lo económico, es necesario que el gobierno genere condiciones óptimas para que las personas no tengan que migrar y puedan seguir en sus comunidades con sus tradiciones.

Una de las acciones para preservar las tradiciones en la que hemos contribuido es el sitio danzafolklorica.com, que es repositorio y biblioteca virtual de muchas danzas y bailes. Algo muy importante es que se ofrece un contexto sociocultural que incluye ecosistemas, fiestas, alimentos, bebidas y otras celebraciones. Algunas de ellas desaparecieron hace años, pero gracias a este repositorio la gente puede conocer la riqueza cultural de nuestro país. Aún falta ir enriqueciendo la página con más información.”

¿Qué va a poder ver el público en este espectáculo de aniversario?

Vamos a ver un recorrido por lo que es México de norte a sur, en el que el amor a la danza folclórica será el ingrediente principal.

Hoy se realizará una gala en conmemoración de los 35 años de existencia de este ballet. La cita es a las 12 horas en el Auditorio del CCU.

El boleto tiene un costo de $40 pesos para el público en general, y $20 para la comunidad BUAP. 

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