Francisco Fraile: Va Acción Nacional sin sumisión a Barbosa

El secretario general del PAN, Francisco Fraile García habló en entrevista sobre el gobierno actual, y de la posición de su partido ante éste

El secretario general del PAN, Francisco Fraile García, advierte que en su partido político no se ejercerá el mismo rol que el PRI desempeñó durante el morenovallismo, de convertirse en comparsa del gobernador, y que sí será oposición ante Miguel Barbosa Huerta.

En entrevista con El Popular, diario imparcial de Puebla, el panista sostiene que se preparan para actuar de forma crítica y no sumisa, porque trabajan para recuperar posiciones de poder perdidas en 2019.

Además, dice que el mandatario estatal lidia con los funcionarios que ven más por sus proyectos personales, en una alusión directa a Fernando Manzanilla, de Gobernación.

Incluso, Fraile García cree que una buena decisión del titular del Ejecutivo sería sacar a este personaje del gabinete.

El secretario general del PAN asegura que acompañará a cualquier panista que sea señalado de presuntos actos de corrupción, para evitar que un proceso de investigación se ejecute como garrote político, pero que es a las personas a las que corresponde responder.

No obstante, advierte, no le importa al partido lo que pase con figuras como Gerardo Islas, porque no es panista, sólo formó parte de un gobierno.

Afirma que el instituto político que representa está en proceso de recomposición, que regresará a sus principios democráticos con asambleas competitivas, y dará más espacios a los militantes.

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La óptica desde la oposición

¿Qué opinión te merece la existencia de una secretaría que en tres meses ya tuvo tres secretarios?, ¿las versiones de la salida de otros funcionarios, en Educación, Seguridad Pública?, ¿hay inestabilidad en el gobierno?—No sólo inestabilidad, hay inseguridad dentro del propio gobierno.

¿Es falta de liderazgo del gobernador, o qué está sucediendo?

—Diría que está enfermo el gobernador y a eso no hay que darle vueltas. Eso lo ha dicho él mismo y acepta que está enfermo; pero también, no es lo mismo dejar (el gobierno) en manos de segundos o de terceros, las decisiones. Creo que ahí hay una falla, y creo que los que le rodean están más interesados en la intriga entre unos y otros para ver quién va a llegar, en lugar de resolver los asuntos actuales.

¿Fernando Manzanilla?

—Especialmente. Hay que recordar, Manzanilla y Moreno Valle, cuñados, fueron la mancuerna inicial de gobierno, que después en el camino se pelean (…) tengo mis severas dudas sobre qué tanto existió ese pleito…

¿Crees que fue simulación?

—La neta, creo que sí.

¿Beneficio?

Él, para ir buscando una posición, que le hacía sombra el propio Rafael. Él es uno de los principales actores que está teniendo dentro de Morena, y a Morena le causa una preocupación. Qué tan leal es a Morena, qué tan leal es al gobernador, y qué tan leal es Manzanilla al propio Manzanilla.

¿Qué tiene que hacer el gobernador para posicionar mejor su administración?

—Hacer cosas, hacer mejores cosas. En lugar de preocuparse qué hizo el otro, es qué hago mejor que el otro. Ése es el ritmo que necesita México, no estar en que fue Calderón, es que fue fulano, o fue Rafael; no, qué hago yo que sea mejor que el otro.

Si tuvieras la oportunidad de sentarte con el gobernador…

—Lo intenté, ya lo intenté…

¿No te quiso recibir?

—No (fue así). Como ahora hay que pedir ficha y hay que hacer cola, me tocó el número 88 y ya no pude entrar, pero lo voy a intentar. Soy terco y envié una carta correcta al gobernador, sobre todo para el asunto del transporte. En el PAN, como partido, siempre estaremos abiertos a un diálogo con todas las autoridades.

En términos políticos, ¿qué consejo darías al gobernador?

—Respete a los partidos políticos. Respete al PT, al Verde, al PAN, que no meta la mano a los partidos políticos, es simple. Es democrático, es de inteligencia humana.

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El trabajo del gobierno

¿Se ha cumplido algo de lo que se prometió en campaña de parte del gobernador y de su partido?

—Quiero partir de un asunto. Barbosa es gobernador por un accidente, por la muerte de dos personas; quiero ponerlo claro, en vivo y a todo color. Él tiene una responsabilidad mayor hoy frente a los poblanos y no demos vuelta, porque él en campaña empieza a decir que va a hacer y deshacer. Lo que le hemos visto hacer es que tiene los ojos en la nuca, no adelante, para ir buscando atrás a ver qué encuentra, porque no tiene respuestas sociales.

¿Es un error político?

—Esto es un gravísimo error político. Puedes ir encontrando los errores del otro y manifestarlos, pero tener como premisa la exhibición de los errores anteriores, lo de borrar la imagen del otro…

¿Le gana más la venganza al gobernador?

—Gana más su venganza. El yo soy y no quiero que nadie me borre, y entonces los anteriores son los malvados.

¿Y no es interés del PAN de que no se investigue lo que pasó?

—Nosotros hemos dicho, y lo vuelvo a decir, si soy funcionario público y se me tiene que investigar porque hay la duda de que el uso del dinero fue correcto o incorrecto, procédase hasta sus últimas consecuencias.

Cuando a mí me señalan siendo delegado del IMSS me voy hasta la última consecuencia, y en un juzgado me dan la razón; el juicio duró tres años y nueve meses, no quise concesiones políticas.

¿Es legal y legítimo que el gobernador Barbosa investigue y si hay responsabilidades, sanciones?

—Sí, y si hay alguien que sea miembro del partido, porque hay que distinguir, haremos un acompañamiento, pero los que fueron gobierno y no son miembros del partido, no me interesan.

Por poner nombres, ¿apoyarán a Pablo Rodríguez por su actuación en Audi?

—Que se haga un juicio. En ese sentido el resolver las cosas es personal; él lleva las siglas del partido y lo acompañaremos en cuanto a proteger que no exista un procedimiento como garrote político. Pero lo otro lo enfrentará directamente cada quien.

¿Personajes como Gerardo Islas?

—No me interesa qué le pase al señor, a tal personaje, ése es problema de él. Con nosotros no militó.

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El PAN al interior

Después de la elección de 2019, ¿cómo se encuentra el PAN?

—El partido está en un proceso de reconstrucción, porque las dos personalidades que perdimos, los dos eran miembros y tenían una influencia dentro del partido y una forma y estilo de hacer las cosas políticas. Hoy volvemos a retomar la esencia del partido.

¿Ha sido fácil este proceso (de reconstrucción), por lo que se vio en la última asamblea municipal?

—Tenemos adversarios que son expertos en agarrarse a golpes y otra serie de cosas. Lo nuestro, si bien es cierto, está (estuvo) en un momento jurídico, todavía transitamos correctamente.

¿Qué tanto estos hechos ayudan al fortalecimiento del partido?

—Todo lo que se haga dentro de la ley y de acuerdo a la ley, vale la pena seguirlo. No puedo acusar a Lalo Alcántara ni a ninguna de las partes por tener una opinión diferente. Si esto se hace por la vía legítima de la ley, bienvenido el tema; preocupados estamos de que se rompa la ley o se hagan maniobras para romper la ley.

Hay detractores que acusan que esto muestra división y falta de liderazgo en el PAN, atribuyendo la responsabilidad a Genoveva Huerta. ¿Así lo ven?

—Genoveva ha hecho un gran esfuerzo por sumar las partes, y nos falta sumar; vamos en la primera parte de lo que teníamos que hacer. Estamos en un proceso en común de buscar una salida correcta al futuro.


¿Va a permitir que se presenten con fuerza en la elección intermedia?

—Tengo la esperanza. No traigo profeta en ancas y discúlpenme, pero soy prudente; quiero decir que las partes nos sentamos al diálogo y encontraremos una salida. Desde 1939 Gómez Morín lo señala puntualmente: en una elección, si tú ganas y te llevas todo, qué bien; pero si pierdes, pierdes todo, y ése no es el sentido de la política. El sentido de la política es que tu adversario también tiene que aportar al partido y a la ciudadanía, y ésa es la suma que debemos tener.

¿En eso consiste la reconfiguración del PAN en Puebla? Porque durante el morenovallismo, el grupo excluyó de tajo a los perdedores, no existió capacidad de diálogo, hasta el final hay un acuerdo con Eduardo Rivera…

—Ahí hay un impacto de lo político. En esa acción del propio Rafael de incluir a Lalo Rivera en la elección municipal (de 2018) está implicando que todos, incluso con esa fuerza (control) que se tenía, había la necesidad de sumar a todos.

¿Pero era un ejercicio sano de la política o la necesidad de mantener el poder, y particularmente de garantizar el triunfo de Martha Erika Alonso?

Haiga sido como haiga sido, me parece que fue un avance en la cuestión de la política, y fue una señal para los miembros del partido de que nadie quede excluido, que todos son necesarios. Nadie es indispensable, pero todos son necesarios.


¿El reto entonces es coincidir entre los diferentes liderazgos al interior del PAN?

—La política siempre tiene actores que consideran que si no pasa la historia por ellos se detiene la historia. Todos deben entender que podemos aportar a la historia.

¿Es posible con perfiles como Jorge Aguilar, Mario Riestra?...

—Claro. Me he sentado con Jorge Aguilar, con Mario, con Lalo Rivera. Me he sentado con todos…

¿Con Pablo Rodríguez? De los panistas identificados con el ala doctrinaria del PAN que tuvo un desempeño cuestionado dentro del partido por su cercanía con Moreno Valle.

—Lo puedo aclarar con una sola palabra: somos panistas, sin apellido, sin abolengos…

¿Ésa podría ser la recuperación del PAN?

—Sí, claro. Sin razones de que entré por A o por B o C; los fundadores del partido siempre pensaron que la motivación personal de ingresar al partido era múltiple: por hambre, orgullo, concepto de superioridad, por todos los conceptos que se quieran. Pero al final el partido lo que hace es la suma de todas esas voluntades y encauzarlas a un punto, y el punto de nosotros es la elección de 2021.

¿Veremos en el PAN el regreso de asambleas competidas, reñidas, como sucedió en Puebla (capital)?

—Ya estamos. Tuvimos elecciones por ejemplo en Chignahuapan, y se ganó por un voto, sin reclamos.

Porque en el morenovallismo se cancelaron esas prácticas

—Sí, pero ahora regresamos. Lo que le da fortaleza a este partido político es la urna, y eso lo queremos volver a revivir ya.

Y el PAN hacia afuera

¿Puede presentarse el PAN como un partido realmente opositor frente al gobierno de Miguel Barbosa?

—Me parece que falta más acción de parte nuestra. Pero estábamos ocupados en lo interno, ya vamos por lo externo.

¿ Sumisos o timoratos?

—No. Vamos teniendo nuestros tiempos; para poder boxear necesitamos entrenar, y qué hicimos, al interior del partido nos preparamos con asambleas para poder salir.

¿Quieren tener buena pegada?

—Claro, si no para qué. Acepté estar aquí porque vamos por la pegada ya.

Pregunto porque en 2010, cuando gana Moreno Valle, el PRI hizo un papel de comparsa. ¿No será el caso del PAN o harán el juego al gobernador Barbosa?

—Desde luego que no.

¿El PAN no será el PRI del morenovallismo?

—Desde luego que no.

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