Puebla capital concentra la mitad de las desapariciones de mujeres

El resto también se reparte en la zona metropolitana de la capital poblana.

Una de cada dos desapariciones de mujeres en el estado tiene lugar en el municipio de Puebla, confirma el último informe del Consejo Ciudadano de Seguridad y Justicia del Estado de Puebla.

De 166 casos que se recoge en el Registro Hemerográfico de Desaparición de Niñas, Adolescentes y Mujeres, 80 tuvieron lugar en Puebla capital, seguido de Cuautlancingo, con siete casos, y Amozoc, San Andrés Cholula, San Martín Texmelucan y Tepeaca con seis casos cada uno.

El mes de diciembre con 28 casos, fue el de mayor prevalencia del fenómeno, seguido de los meses de octubre y agosto con 25 y 17 casos respectivamente.

Por la información publicada en los medios de comunicación, indica el Consejo Ciudadano, se observa que en menos de la mitad de los casos (43 por ciento) se inició de una carpeta de investigación por el delito de desaparición; en el resto se sugiere que pese a presentar la denuncia no se abrió la carpeta.

Del registro hemerográfico se advierte también que del total de casos registrados en 2019, sólo 30 por ciento concluyó con la localización de la niña, adolescentes o mujeres desaparecida, la mayoría de ellas con vida; cuatro mujeres, sin vida.

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En siete de los casos totales, las mujeres fueron víctimas de algún delito plenamente identificado, entre ellos desaparición cometida por particulares, feminicidio, robo y lesiones, secuestro y violación.

Aunque en la mayoría de los casos no fue posible conocer la ocupación de las personas desaparecidas (76 por ciento), sí se pudo confirmar que hasta una quinta parte de las niñas, adolescentes y mujeres desaparecidas en Puebla durante el año pasado son estudiantes.

Por rango de edad, refiere el informe, una tercera parte (51 casos) son adolescentes y mujeres jóvenes de entre 15 y 19 años; aunque también se ubican como grupos en riesgo a aquellas personas entre 10 y 14 años, con 25 casos; y de 20 a 24 años, con 22 casos.

El Consejo Ciudadano advierte finalmente que en el análisis de los casos se recogieron ciertas anomalías, como el que las familias no pudieron denunciar las desapariciones sino hasta después de 72 horas, lo que sugiere falta de capacitación del personal en los protocolos de búsqueda por parte de la Fiscalía General del Estado (FGE).

Asimismo, se pudo identificar que algunas de las personas desaparecidas fueron víctimas de estigmatización desde el inicio por medios de comunicación y autoridades.

 

 

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