EFE | Varios restaurantes y hoteles se vieron afectados Más de 5 mdd por vandalismo tras marcha Ayotzinapa
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El presidente de la Canirac, Francisco Fernández, dijo que es preocupante el actuar de los manifestantes
Los actos de vandalismo ocurridos en la marcha por los 43 estudiantes de la Escuela Normal de Ayotzinapa desaparecidos en 2014 dejaron pérdidas de unos 100 millones de pesos (5.09 millones de dólares), informó este viernes la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac).
El presidente de la Canirac, Francisco Fernández, precisó que, según les comunicaron restaurantes como Toks, La Gloriosa o el Hotel Hilton, las pérdidas ascienden hasta a 100 millones de pesos, teniendo en cuenta pérdidas materiales y las derivadas de cerrar el establecimiento. Comentó que los restaurantes que cuenten con el capital para reparar los daños podrán recuperarse más rápido.
Reconoció que habrá otros que tengan que cerrar unos días y por tanto no facturarán, o tendrán problemas porque habrá clientes asustados de regresar, por lo que subrayó que hay una afectación importante.
A la Canirac lo que más le preocupa “no son tanto las pérdidas materiales que pueda haber, sino cómo se pone en peligro la integridad física” de los clientes y trabajadores de los establecimientos.
Puedes leer: Se registran actos vandálicos durante marcha Ayotzinapa“No se vale, no, que llegue un grupo de gente que irrumpa y rompa y destroce y es realmente lo que lamentamos, que este tipo de acciones se permitan,” criticó el presidente de la Canirac.
Agregó que también molesta que estas personas tengan la libertad, durante dos horas, de hacer lo que quieran, algo que consideró reprobable. A esta protesta sumó una crítica al gobierno capitalino, quien a su juicio, “no se hace presente”.
“Esta gente son criminales”, dijo sobre quienes cometieron estos actos, que fue un grupo reducido durante la marcha en la capital de miles de personas para recordar la tragedia de Ayotzinapa, en la que desaparecieron 43 estudiantes un 26 de septiembre de hace cinco años.
El Centro Histórico de la capital amaneció el viernes con pintas que culpan el Estado de la desaparición de los estudiantes y que exigían encontrarlos cuanto antes.
Algunos establecimientos ya habían pintado de nuevo sus paredes y habían extraído los cristales rotos, mientras en otros se podían observar cristales agrietados por los golpes.
Arturo, trabajador de una pizzería que presenció los hechos, contó que una hora antes de la marcha fueron avisados por autoridades municipales que un grupo reducido de manifestantes venía causando destrozos.
“Los que iban más atrás llegaron rompiendo vidrios, las mesas las sacaron, las aventaron para atrás, prendieron fuego, grafitearon”, explicó Arturo.
Minutos después de que se fueran los manifestantes, las autoridades municipales llegaron al restaurante, para ayudar a retirar los cristales rotos y limpiar las pintadas.
