Escribe: Gabriela Moreno Valle Bautista/@GMorenoValle

Fue el 11 de marzo cuando la Organización Mundial de la Salud calificó de “pandemia” al brote de coronavirus, desde ese día muchas cosas se han alterado todos los ámbitos de la vida; los modelos educativos no han quedado exentos de ese cambio.

Es una tormenta que todas las personas vivimos…pero en barcos diferentes.

Hablando únicamente de estudios universitarios, ámbito en el que me desempeño, desde hace ya tres semanas cambió el modelo presencial por el virtual e impartimos clases desde diversas plataformas, solicitamos al alumnado que descarguen en sus dispositivos electrónicos algunas aplicaciones como Zoom, Teams, Remind, para poder trabajar, les pedimos que vean videos, que bajen lecturas de páginas electrónicas, hacemos exámenes en Socrative, Kahoot y otras; la gran mayoría de ellas y ellos lo hace sin problema.

En lo personal les digo a mis alumnas y alumnos que hagan “lo que les toca” que se den cuenta de lo afortunadas que son por estudiar en universidades que cuentan con los elementos tecnológicos necesarios, plataformas como CANVAS, BRIGHTSPACE; BLACKBOARD, MOODLE, por tener acceso a la educación, por tener la posibilidad de continuar con sus estudios desde sus hogares en los mismos horarios y días de las “clases normales”, han respondido bien, con entusiasmo y compromiso.

Sin duda la educación es un pasaporte al futuro personal y para un crecimiento social y económico; en los países de la OCDE 83% de las personas con titulación universitaria tienen un empleo, en comparación con 55% de las personas que poseen sólo un diploma de educación secundaria, de igual manera aumenta el ingreso económico.

¿Qué sucede con las y los alumnos que no tienen acceso a los mencionados medios electrónicos? ¿Qué pasa con las universidades que no cuentan con plataformas electrónicas como herramientas de comunicación?¿Qué sucederá con el semestre que transcurre?¿Contarán las y los estudiantes con los conocimientos necesarios para desempeñar sus actividades profesionales en un futuro?

Sin duda las brechas educativas crecerán, habrá más diferencia entre el alumnado de unas universidades y de otras, pocos alumnos y alumnas contarán con los conocimientos que fueron programados al inicio del semestre lo que sin duda trascenderá en el resto de sus estudios; el alumnado menos afortunado tendrá que hacer un gran esfuerzo para no quedarse atrás, para no perderse en el mar del conocimiento, un gran reto…confío en que lo logren.