Marzo es el mes dedicado a la mujer. Y no quise que pasara desapercibido, han sido tantos los movimientos en los que ellas son protagonistas, que justo llegué a la reflexión, de la relación de las mujeres con todas las celebraciones que tenemos los seres humanos.

La sensibilidad que define a una mujer es pieza clave para el desarrollo de un evento, aunado a su capacidad de administrar y de contemplar hasta el más pequeño detalle, sin importar si es un evento pequeño o hasta una gran boda.

Los valores como la unión definen la esencia del evento mismo. Recordemos cómo las abuelas en muchas familias siguen siendo los pilares, y lograr hacer que éstas se reúnan cada fin de semana en una típica comida familiar. Y cuando ella se va, por lo regular también desaparecen esas reuniones.

Son las mujeres en su afán de halagar a alguien, pueden organizar desde un pequeño pastel para celebrar un cumpleaños, hasta un desayuno muy lindo con sus amigas, un baby shower para apoyar a otras mujeres en su nueva vida de mamá, una despedida de soltera para orientar a la nueva casadera, o bien una cena de negocios para apoyar a su esposo en ese ascenso o búsqueda de nuevos clientes o cierres de contrato. ¿Y qué decir de una Boda? Simplemente sin su presencia no serían igual, son las mujeres las que le dan ese toque tan especial, ya sea siendo la novia, alguna mamá, las proveedoras o las planners. Donde el apoyo es el común denominador.

¿Por qué mujeres? Por ser en muchas ocasiones quienes administran un hogar y conocen sus necesidades reales desde la raíz y saben proyectarlo hacia los demás. Porque en su mayoría aman las flores y éstas nunca faltan, porque son maniáticas del orden y los detalles, porque muchas de ellas en su papel de madres les gustan que cada invitado se sienta apapachado y que se ha pensado en él. Porque les gusta apoyarse unas con otras, porque una mujer considera con inteligencia qué si va a lucir en un evento y hasta dónde la inversión se torna un gasto superfluo. Porque además saben de comida, elemento clave en toda celebración… porque nos aman.

Obviamente no todos los eventos son organizados por mujeres y cuando los hombres intervienen se logran maravillas y más si esto es en conjunto, la combinación es majestuosa, pero en la reflexión de ésta mañana me hizo mucho sentido re valorar el papel de las mujeres en la realización de los eventos., sin importar el número de invitados o la magnitud del mismo. Creamos en nosotras y sigamos creando.