Los vecinos de la zona indicaron que provenía de la parte alta del cerro, a la altura del paraje conocido como Cantera, por lo que solicitaron la intervención de las autoridades municipales para que investigaran, ya que está prohibido que se dinamite la zona y el ruido fue similar a una explosión de dinamita.

En un comunicado de prensa, las autoridades municipales informaron que el estruendo que se escuchó la noche del día miércoles y que cimbró las casas de alrededor fue causado por la quema de pirotecnia que fue decomisada del taller de San Hipólito, y que las acciones de seguridad estaban controladas por personal del Ejército Mexicano.

Los daños que causó la explosión de la bodega en San Hipólito, ubicada en la calle Durango a unos metros del Palacio Auxiliar y de la iglesia, fueron valuados en miles de pesos. Las autoridades municipales desmintieron que existan estudiantes lesionados por el siniestro; sin embargo, la expansión de la onda afectó tres instituciones educativas, que están siendo investigadas por las autoridades correspondientes. Las clases se reanudarán hasta que se descarten riesgos para los alumnos.