Los ocho mejores libros para diciembre

La época es ideal para buscar el refugio y la reflexión; en estos días, lo mejor es acompañarnos, de un buen libro

Diciembre llegó, y con él nuestro tercer número de Libélula, por lo que estamos felices de empezar este mes con algunas recomendaciones literarias. Los cambios de temperatura se dejan ver en la calle entre bufandas y guantes, todo se empieza a vestir de Navidad. Resulta también la época favorita de muchos escritores, época en la que plasmaron alguna de las tradiciones que conllevan estas fechas. Aquí las mejores historias decembrinas.

Lee: Capilla Sixtina, mensaje de belleza y amor en Puebla


Cuento de Navidad, de Charles Dickens (1843)

Es el libro clásico por excelencia. Los fantasmas de fin de año tratan de infundir en el tacaño señor Scrooge el espíritu navideño. El autor nació en una familia sin muchos recursos, pero a pesar de la falta de lujos, esta época del año era una de sus preferidas.

La Navidad en las montañas, de Ignacio Manuel Altamirano (1871)

Es la tercera novela del escritor y político liberal mexicano, donde narra el encuentro entre un capitán, que luego de combatir en la Guerra de Reforma (1858-1860), vaga por algún lugar de las serranías de México; y un cura español, quien ha logrado llevar a la práctica una utopía social en un pueblo, cuya ubicación no nos es dada. Y todo sucede en la víspera de la Navidad.

La pequeña cerillera, de Hans Christian Andersen (1845)

Se ha convertido en un clásico infantil de Navidad gracias al clima especial que crea la narración, acompañada con detalladas ilustraciones dibujadas por el propio autor.

Una visita de San Nicolás, de Clement Clarke Moore (1823)

El título original es Night before Christmas y es un gran poema. Su aportación crucial es la concepción moderna de Papá Noel.

El regalo de los Reyes Magos, de O. Henry (1905)

Una pareja recién casada y su reto de hacerse regalos de Navidad en secreto, sin apenas dinero. Tiene un giro final que caracteriza a la mayoría de los relatos de O. Henry.

Navidades trágicas, de Agatha Christie (1938)

Simeon Lee le pide a Poirot que pase las Navidades con él en su mansión en Garston, ya que teme por su vida después de recibir seis diamantes provenientes de su museo en Sudáfrica. Como un huésped inesperado entre los miembros de la familia Lee, el inspector Poirot está inmediatamente disponible cuando Lee es encontrado en un charco de sangre, degollado, y los diamantes han sido robados. Todos los parientes se vuelven sospechosos de ser culpables de este misterio, que sólo Poirot podrá develar.

La Navidad para un niño en Gales, de DylanThomas (1952)

Esta novela nos hará revivir nuestros recuerdos de la infancia. El relato nos lleva a un pueblo de la costa de Gales lleno de gatos, carteros y niños ansiosos por jugar con la nieve, que cayó “durante seis días con sus noches cuando yo tenía doce años, o durante doce noches y doce días cuando tenía seis según nos cuenta el autor al principio del libro.

El gigante egoísta, de Oscar Wilde (1888)

El gigante no dejaba que los niños jugaran en su jardín; por eso allí se había instalado el invierno para siempre y los árboles se olvidaron de florecer. Pero un día, el amor de un niño conmovió el duro corazón del gigante y entonces comprendió cómo el egoísmo había alejado a la primavera.

  • URL copiada al portapapeles