No hubiera escrito nada si no hubiera sido periodista: JJ Benítez

Con más de 40 años investigando, pasando por su saga Caballo de Troya, Juan José Benítez publica la serie El diario de Eliseo

A Juanjo Benítez se le puede reconocer por el atuendo casi siempre. Ahora, lo mismo que hace más de tres décadas, su vestimenta es similar a la que utiliza en una investigación de campo: camisa remangada y chaleco. Es innegable que mantiene su costumbre y se nota su constancia, marcada por más de 40 años investigando.

También se observan las arrugas de los 73 que cumple, de las numerosas vueltas al mundo que ha realizado, pero sus ojos desprenden una luz especial, quizás reflejando todo el aprendizaje que ha ido internalizando a lo largo de su dilatada vida profesional.

Escritor, investigador y sobre todo, según comenta, periodista, acaba de llegar de un viaje de trabajo que lo ha llevado por Escocia e Islandia y que también lo hizo pasar por Argentina. “Además, en diciembre visitaremos México a presentar el libro y para trabajar en un par de temas de investigación,” comenta.

Y es que el autor de la saga Caballo de Troya acaba de editar el libro que cierra –de momento- ese lote de historias alrededor de la vida pública de Jesús, El diario de Eliseo. Donde ofrece datos que le ha facilitado, indica, el piloto de la nave que viajando en el tiempo estuvo en esa época siguiendo al hebreo más famoso de la historia.

Sobre cómo le gustaría que se le recordara en la posteridad afirma: “desearía que mi trabajo sirviera a los historiadores del próximo siglo, porque lo que los investigadores estamos recogiendo ahora, sobre el campo, dentro de cien años nadie podrá hablar con testigos y es historia. Y hay que hacerla muy bien, con mucha honradez”.

Y con esa claridad, sin ambajes, comenzamos la entrevista en uno de los hoteles más céntricos de la capital de España.

Lee: Bailarina brasileña Ingrid Silva recibe zapatillas revolucionarias


¿Cómo le va haber vuelto a retomar los Caballosla serie de Caballo de Troya?

Me he quedado un poco sorprendido. Ayer mismo me dijo la editorial que habían lanzado una segunda edición de El diario de Eliseo y hace bien poco que está en las librerías. Eso es importante, teniendo en cuenta que es un libro, grande, pesado y caro. 

La siembra que hace desde hace 34 años. ¿Qué dicen sus seguidores americanos?.

En América la aceptación es increíble. Las personas, cuando hago una presentación se agolpan. Es increíble. La gente es supercariñosa en todos los países. Acudiremos a México en diciembre a la Feria del Libro de Guadalajara.

¿Pero sigue con tus investigaciones del fenómeno OVNI habituales?

—Sí precisamente aprovecharé ese viaje para acudir a investigar varios casos allí.

¿Cuánto tiempo lleva dedicado a estos temas?

—Llevo ya 47 años siguiendo este asunto.

En el libro, el supuesto pasajero del tiempo que comparte “aventuras” con Jesús de Nazareth le indica que El diario de Eliseo lo debe publicar en 2019.

—Me dio una razón. Que era un aniversario, pero revisé todos los “Caballos” y no he averiguado a qué se refiere. Quizás algún lector lo pueda adivinar…

¿Podría deberse, quizás, a algún cambio próximo que nos afecte?.

—Hace un tiempo publiqué el libro Gog, en el que contaba que existe una teoría por la que, en el año 2027, va a chocar un meteorito muy grande contra la tierra. ¡Ojalá esté equivocado! Pero, si eso se produjera, quizás la obra completa del Caballo de Troya, con este último tomo, tendría sentido, porque le lleva mucha esperanza a la gente.

Además indica que le entregó otro material que está preparando, pero que no lo puede publicar…

—Sí, se trata de Rayo Negro, que es una información que no tiene que ver con la vida pública de Jesús, es anterior en varios años, pero no tengo ni idea de cuándo lo querrán publicar mis fuentes.

¿De qué tratará?

Es una historia muy interesante de un Jesús completamente desconocido que va por el mar Mediterráneo y por la zona del Asia Próxima que la recorre como observador. Que yo sepa no hay milagros, no hay prodigios.

Una vez que le pasan estos materiales confiesa que se los da a tres traductores. ¿Qué puede decirnos al respecto?

Procuro siempre que no se conozcan entre sí y, además, nunca acudo a los mismos. Intento darles estas importantes traducciones del inglés y que no me conozcan. Además tampoco hago yo personalmente la gestión.

Su último libro sobre la serie fue El día del relámpago ¿Se necesitaba ahora otra historia como la que ha publicado?

—Ha ido todo muy encadenado. Me parece que va bien.

¿Qué reacciones recoge de los lectores?

Todos los días recibo cartas y cientos de correos electrónicos en los que el factor común es decirme: “me han ayudado mucho”, “me han cambiado la perspectiva”, “mentalmente pienso de otra manera”… Y eso es muy satisfactorio.

¿En esencia, cómo ve El diario de Eliseo?

Es una obra que transmite muchos valores positivos. A pesar de las sombras que también hay en el libro, porque este señor –Eliseo- es realmente un hombre oscuro y un militar que lo que quiere a toda cosa es obtener unos objetivos que no tienen nada que ver con lo que hacía el anterior protagonista de la serie, El Mayor, un personaje mucho más benévolo.

¿Ve la serie entonces como muy optimista?

—En su conjunto, los once volúmenes son muy positivos. Llevan mucha esperanza a la gente mostrándoles que no deben estar sometidos a la servidumbre de las religiones. El personaje de Jesús que aparece en los “Caballos” es extraordinariamente cercano.

¿Qué le ha dado y le ha quitado esta serie?

—Me ha cambiado. El primer sorprendido fui yo cuando recibí esa información y no me la podía creer. La revisé, investigué todo lo que pude y hasta donde pude y no cabe duda de que, antes del “Caballo…”, era de una manera de pensar y, ahora, soy de otra. Ha sido muy positivo porque tengo una gran confianza que, después de la muerte voy a seguir vivo, aparte de las investigaciones que estoy haciendo sobre este tema. Y estoy seguro al 150 por ciento que, tras el dulce sueño de la muerte, hay vida, una vida física.

¿Le ha hurtado algo?

—No, en principio no. Creo mucho en el destino y ¿qué hubiera sido si no hubiera publicado todo lo que he dado o de no haber sido investigador? Alguna vez lo he pensado. Hubiera sido un periodista normal, a las órdenes de la redacción y, llegado el momento me hubiera jubilado. Pero hubiera disfrutado. No hubiera podido escribir nada si no hubiera sido periodista.

¿Cómo ha evolucionado como persona y como investigador JJ Benítez?.

Como persona no estoy muy seguro —risas—. Tengo los mismos defectos que antes o más. Como investigador me he vuelto más prudente, más selectivo, más sereno.

¿Qué trabajo tiene entre manos?.

He terminado hace unas semanas el cuarto volumen de una serie sobre el fenómeno OVNI que voy a hacer y constará de ocho libros. Estoy constantemente investigando.

  • URL copiada al portapapeles