La memoria de la nostalgia, Blues vagabundo

El escritor Adán Medellín dijo que su libro son historias contadas desde la historia y las historias de su alrededor, de gente que vive cosas similares

En una apuesta por el blues, género que ha debatido y discutido con el sistema al que pertenecen sus intérpretes, el escritor Adán Medellín plasma en Blues Vagabundo historias de la vida del género y propone una meditación sobre la similitud de estas eventualidades en México.

Adán Medellín, un autor multipremiado por la calidad de su redacción, dijo para El Popular, diario imparcial de Puebla, que en su más reciente producción literaria eligió retomar este género, porque además de su gusto, le representa un estilo que ha reflejado la opresión de distintos sectores de la sociedad.

Es importante entender que el blues nace como una respuesta de una necesidad de expresión de un grupo que fue marginado muchos años: la raza negra en el sur de Estados Unidos. Entonces siempre tuvo un componente social importante, de expresión de desigualdades muy importante.”

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Rebelión del arte

El libro se narra alternando entre la temporalidad y el espacio, a fin de comprender que el blues es un género que ha trascendido por varias generaciones, que si bien se ubican en un contexto distinto, viven y sufren las mismas eventualidades.

De acuerdo con el autor, se trata de un género que debate y discute con el sistema del que se siente oprimido, y es a partir de esas historias llenas de mitología de la rebeldía artística, que muchos artistas plasmaron sus inconformidades y luchas desde su música, el arte y la poesía.

“Esa historia, aunque parece muy contada, es desconocida en México, pues también se ven esclavitudes en cuestiones cotidianas desde lo racial y lo económico”, comenta el autor.

La inspiración

Adán Medellín expone que al momento de comenzar la redacción del escrito, se encontraba en una época difícil personalmente, y era a través de la música y las letras, a las que podía aludir como una válvula de escape, de modo que no podría calcular el tiempo que le llevó escribir el libro.

Son historias con las que yo me relacionaba y quise contarlas desde esos dos lugares: desde ese juego histórico y desde las historias que conocía a mi alrededor, de gente que estaba viviendo cosas similares que pude plasmar y embonar en el libro.”De la reflexión

Gran parte de su relación con la música al momento de estar escribiendo, además de sus nostalgias pasajeras, quedaron plasmadas.

Queda una parte muy entrañable y muy musical de mí. Ese Adán musical, entrañable, muy nostálgico y un poco triste, está reflejada en el libro y es parte de la búsqueda de seguir aprendiendo con cada libro.”

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