El día en que se derogó el pizarrón

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La pedagogía tiene mucho más de arte que de ciencia”

Fernando Savater

 

En este inicio de ciclo escolar nuevamente se pone en la mesa esa complejidad que tienen actualmente los profesores de los diversos niveles de educación, sin importar si se trata de escuelas primarias o los grados más altos de la educación, que consiste en lograr captar la atención de los alumnos, pues los maestros en la actualidad se encuentran ante grandes retos, en primer término ese ambiente generalizado que debe de superarse que describe el profesor español Fernando Savater: “Quienes asumen que los maestros son algo así como deberían concluir entonces que la sociedad democrática en que vivimos es también un fracaso” (SAVATER, Fernando. “El Valor de Educar” Editorial Ariel. Barcelona España. 2009)

Y ya con esa lapida encima, el problema ya comentado, que cada día se agudiza más con la tecnología de la información, que provoca la falta de atención a las clases, la complejidad de atraer la atención de alumnas y alumnos, que sin importar el tipo de estudio, nivel o si se trata de educación de escuelas oficiales o privadas, el mal es generalizado, la falta de atención de los alumnos a las lecciones, clases, cursos, que provoca la primera problemática con que cuenta el profesor, mantener a alumnos y alumnas en atención permanente a lo que se está explicando, exponiendo, debatiendo, dialogando en una clase, lo que es hoy de lo más complicado para un profesor, por ello es que asume muchas posiciones al respecto para enfrentar ese problema y que se pueden resumir en estas tres: una de ellas es la posición del profesor de la indiferencia de que tomen o no atención los estudiantes a lo que se está explicando, que es la posición más sencilla, pero la más vergonzosa como profesor, la intrascendencia de su trabajo, es la propia intrascendencia de su vida, el resultado es claro el rendimiento del alumno es pésimo a pesar de que las calificaciones digan otra cosa.

Otras de las posiciones que se asumen ante esa problemática por parte de los profesores y profesoras es la prohibición del uso de esos medios electrónicos lo cual es prácticamente imposible de que se logre, pues siempre el alumnado ve los medios como para poder lograr el cometido de la distracción, actos de contorsionismo y gimnasia de alto grado de peligrosidad con tal de lograr distraerse con los equipos electrónicos, está demostrado que provoca ansiedad la lejanía de esos equipos durante un tiempo muy corto.

Uno más de las posibilidades que se presentan para profesores y profesoras es hacer uso de los medios electrónicos en las clases lo cual provoca que sean una herramienta dichos equipos para el estudio, dejando atrás desde luego el vetusto pizarrón, pero que tampoco exenta que se puedan distraer con esos equipos y lejos de provocar que sean de uso se vuelve la distracción permitida. Lo cierto es que en la actualidad la educación, como el mismo sistema educativo, las instituciones y organizaciones al respecto hacen mención de que se encuentra en crisis la misma, y esto es partiendo de esa distracción permanente que hace 20 años no sucedía es un tema verdaderamente preocupante respecto a los estudiantes que se están actualmente formándose. Sin embargo como se sostiene por el profesor español Savater la pedagogía es más arte que ciencia, mas intuición del profesor que conocimiento técnico, y ese es el gran reto de la lucha permanente, en cada ciclo escolar contra la distracción de los alumnos, pues pareciera que ha llegado el día en que se derogó el pizarrón de clase. 

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