Qué tal vecinos, cómo les ha ido con las tormentas que han azotado la ciudad de Puebla. Ya ni hablamos del granizo que cayó y maltrató vehículos, techos y demás. De eso no tiene culpa el gobierno… Peeero, porque siempre hay un pero, mucho nos ayudarían desazolvando las coladeras, y nosotros los ciudadanos haríamos mejor dejando de ser tan cochinos y ya no arrojar basura a la calle.

Oigan, se cuenta que más allá de la elección de Alejandro Moreno como líder del PRI nacional, y el fiasco que representó la jornada de votaciones en Puebla, llama la atención la presencia de ciertas figuras locales en el anuncio del triunfo, específicamente Blanca Alcalá, de quien ya se habían olvidado después de su encargo como embajadora. Ya hasta parecía exiliada,

La exalcaldesa de Puebla, comentan, trae una espina clavada porque cree que pudo ganar la gubernatura en 2016 si el morenovallismo hubiera jugado limpio… Pero como diría el dios de la bohemia, José José, lo que un día fue no será y no se puede cambiar. Pero nos comentan que Blanca alista su regreso a la política activa de cara al 2021 y, si la dejan crecer, hasta el 2024.

¿Veremos a Blanca otra vez en la urnas? Ya se verá.

Qué condescendiente nos salió Genoveva Huerta, la lideresa estatal del PAN, al anunciar que ya no habrá sanción en contra de los diputados locales que se ausentaron durante a votación de la reforma barbosista para la reestructuración de la administración pública estatal.

Dicen que los legisladores en su oportunidad le advirtieron que no estaba en posición de castigarlos porque son lo único que le quedan al partido para mantener presencia en círculos de poder y toma de decisiones, y por supuesto fue de tal grado el calambre que optó por dar marcha atrás y “perdonarlos”…

Otra cosa nos cuentan es que los recursos que se entregaron a Smart City Latam darán mucho de qué hablar porque entre los morenistas andan con la intención de exhibir casos de corrupción, y por lo que nos han dicho es que van a buscar los eslabones más débiles que permitan presentar denuncias por desvíos de recursos o enriquecimiento ilícito.

Hasta ahora el exgobernador Antonio Gali ha hecho mutis, aunque creen que ya llegará el momento de que explique, y de ahí cualquier otro que tuviera relación directa o indirecta con la transferencia de fondos para esa organización.

Oigan, vecinos, ¿verdad que no está nada mal que el gobierno de Miguel Barbosa ya aliste las licitaciones para la creación de nuevos verificentros después de que el morenovallismo desapareció a muchos de un jalón? Ellos creen que eso permitirá mejor atención a los ciudadanos y menos actos de corrupción de parte de los prestadores del servicio.

Eso sí, nada más hace falta que en realidad alguien los supervise para garantizar que no volverán los vicios que exhibieron en el marinismo, porque es cierto había opciones para agilizar el trámite pero también había irregularidades a manos llenas... ¡Muy llenas!